Fin de una época
Con esta entrega, la segunda época de la revista Discurso Visual llega a su fin. Durante ésta se produjeron 22 números, que se suman a los diez de la primera, para dar testimonio de más de doce años de trabajos de la comunidad del Centro Nacional de Investigación, Documentación e Información de Artes Plásticas (Cenidiap).
Pero no solo de ella; en sus páginas (o mejor dicho, sus pantallas) han colaborado también académicos, curadores, críticos y artistas de otras procedencias.
Nos enorgullece particularmente dar cabida tanto a personajes de gran reconocimiento como a jóvenes graduados y posgraduados que se inician en las labores de investigación y crítica cultural. Más de 260 textos constituyen el legado de esta segunda época cuyos autores sería imposible referir aquí.
Publicamos, sin embargo, un índice general y anunciamos, orgullosamente, que todos los números de la revista seguirán en línea. La revista incluyó en casi todos sus números la publicación de un libro electrónicocompleto en formato PDF, los cuales ahora se agrupan en la Biblioteca Digital de nuestra página web www.cenidiap.net, y que muy pronto estarán disponibles también en otros formatos electrónicos, de los más usuales para los dispositivos móviles (tabletas y celulares).
Las temáticas de estos textos fueron tan amplias como lo es el campo de las artes visuales en la actualidad: pintura, escultura, gráfica, arquitectura, fotografía, cine, diseño, instalación, performance, videoarte, gráfica digital, grafiti y sus combinaciones y fusiones. No faltaron textos teóricos y el análisis crítico de funciones e instituciones como el museo, la museografía, la curaduría, el coleccionismo, las galerías, la educación artística, la crítica de arte o la política cultural. Todo ello desde marcos disciplinarios e interdisciplinarios provistos por la historia, la sociología, la filosofía, la pedagogía y la propia formación artística, con una amplitud temporal que va desde el siglo XIX hasta lo que llevamos del XXI. Los artistas objeto de reflexión incluyen desde lo más consagrados y emblemáticos hasta los jóvenes emergentes, y desde obras y acciones afiliadas a la corriente principal del arte internacional hasta las manifestaciones estéticas de movimientos sociales contestatarios pasando por el arte popular. No fue, además, el arte mexicano el único protagonista, aunque sí el principal, pues se incluyeron textos sobre arte europeo, norteamericano y latinoamericano.
Lo que caracterizó sobre todo a esta segunda época, además de un nuevo diseño (debido al Estudio de Germán Montalvo) y programación (que incluía una página de entrada con música compuesta ex profeso por Arturo Márquez), fue su funcionamiento: se formó un comité editorial, integrado por académicos y directivos del Cenidiap, que dictaminó todos los textos propuestos para su publicación y seleccionó aquellos que, a su juicio, debían ser publicados. Las personas que integraron el comité en sus diversos momentos, pues se renovaba sistemáticamente para dar pie a la pluralidad de perspectivas temáticas y críticas, son las siguientes (en riguroso orden alfabético):
Georgina Alcántara, Patricia Brambila, Alejandrina Escudero, Antonio Espinosa, YanetFernández, Ana Garduño, Carlos Guevara, Marta Hernández, Cristina Híjar, Gerardo López, Carlos Martínez, Pilar Maseda, Gabriela Mijangos, Ana Rodríguez, AmadísRoss, Agustín Sánchez, Alicia Sánchez Mejorada, Teresa Suárez, Guadalupe Tolosa, Leticia Torres yNadia Ugalde. A todos ellos, el Cenidiap les agradece cumplidamente su esfuerzo, su dedicación, su compromiso y su profesionalismo para realizar la tarea que les fue encomendada y que llevaron a cabo con excelencia.
El agradecimiento no estaría completo si no se mencionara al equipo de producción editorial, encabezado durante veinte números por el indispensable Carlos Martínez y durante los últimos dos por el eficiente y profesional Amadís Ross, además de los diseñadores-programadores Rubén Ascensio, Yolanda Pérez, Tlaoli Ramírez y José Luis Rojo, sin cuyo trabajo, conocimientos técnicos y creatividad la revista no hubiera sido posible; además de los colegas investigadores que amablemente colaboraron de manera eventual o sistemática en diversos procesos técnicos editoriales (corrección de estilo, revisión de pruebas, edición de fotografía, etc.), como César García, Margarita González, Martha Hernández, Aurelio Salas, Guadalupe Tolosa. Hay que reconocer también el esfuerzo y la dedicación del director-fundador Alberto Argüello y del director de casi toda la segunda época, Carlos-Blas Galindo. A todos ellos, de nuevo, muchas gracias.
A partir del próximo número, Discurso Visual tendrá otro diseño, otra presentación, otra funcionalidad y, sobre todo, otro funcionamiento como revista académica arbitrada según los estándares internacionales. Con el fin de no desatender, sin embargo, las importantes labores de difusión y divulgación del conocimiento artístico, el Cenidiap lanzará próximamente una segunda revista que, con características distintas, permita cumplir cabalmente estas funciones. Así que, como siempre, el fin de una época es también el principio de otra.
Carlos Guevara Meza
Director del Cenidiap