Intervenciones artísticas urbanas y educación social en la España multicultural

Utilizando como ejemplo los proyectos Madrid Abierto y Migrantas, en seguida una reflexión acerca de cómo los inmigrantes son objeto de análisis y representación por parte de grupos plurales que trabajan el arte público en busca de una integración que enriquezca la cultura y la sociedad española y europea.

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MARÍA LUISA HERNÁNDEZ RÍOS • DOCTORA EN HISTORIA DEL ARTE
Universidad de Granada, España
mhrios@ugr.es

GUADALUPE TOLOSA SÁNCHEZ • HISTORIADORA
Investigadora del Cenidiap
guatolo@yahoo.com

Dimensión social de las intervenciones urbanas

Las creaciones y acciones contemporáneas en espacios públicos son objeto de numerosas reflexiones que van más allá del propio discurso artístico, ya que junto a los creadores, participan en el debate acerca de su práctica filósofos, críticos, sociólogos, historiadores del arte, arquitectos, pedagogos y políticos. Procurar a los objetos artísticos una óptica más cercana a la dimensión política y social refleja los cambios de la intervención cultural en espacios urbanos que, con la transformación compleja de las ciudades, precisa enfrentar desde una perspectiva pluridisciplinar las nuevas recepciones, los nuevos conflictos y las nuevas formas de opresión, así como la adquisición de compromisos para con la ciudadanía a la que se destina, hace partícipe o necesita de su responsabilidad.

Al referirnos al concepto de arte público, siguiendo al artista estadunidense de origen iraní Armajani,(1) entendemos al arte como conquistador de nuevos territorios al extender su campo de actuación a la experiencia política, social y cultural, desde una referencia de vinculación íntima que establece relaciones entre la configuración del espacio urbano y la consideración e implicación de aquellos que viven, disfrutan y padecen dichos sitios. Intervenir en el espacio público, pues, requiere dotar de explicación a las acciones que se ejecutan en él, corriendo el riesgo de una fortuna diversa y cambiante.

Muchos de los proyectos de intervención artística, en los que la evidencia del carácter efímero de sus acciones queda patente de forma muy generalizada, requieren al mismo tiempo trascender realidades artísticas que reflejan la nueva sociedad que se configura en el ámbito de actuación. En este sentido, es necesario el planteamiento de una relectura de la historia social, pues es nueva la manera de tratar y visualizar muchos de los efectos que, al surgir de las entrañas de la globalización, afectan a las ciudades y con ello al total de la ciudadanía.

Sociedades como la española, que en los años de eclosión económica comenzó a percibir y hacer frente a los efectos de una entrada masiva de personas procedentes de un ámbito territorial diverso, no han quedado indiferentes a los cambios producidos en sus ciudades desde la llegada de esos nuevos pobladores, portadores de riqueza multicultural para las urbes y entornos próximos a ellas. En definitiva, hombres y mujeres de distintas procedencias geográficas, étnicas y religiosas, han sido protagonistas de múltiples reflexiones y no pasan inadvertidos para grupos plurales que trabajan en contextos significativos de arte público.

Muy llamativo para los habitantes de las ciudades ha sido la manera de asimilación de los cambios que se han producido a lo largo de los años en espacios de tradición legítima, donde los perfiles de los nuevos personajes con los que han de convivir les han hecho pasar de la indiferencia a la sospecha y de ésta al rechazo, pero también a la paulatina aceptación. En las condiciones actuales se trata de lugares de convivencia que presentan una imagen muy contrastada: a veces de predominio agresivo, otras tolerante y acogedora, en ocasiones pacífica y sostenible, independientemente de las dificultades que ello conlleva.

Los artistas no han sido indiferentes a dichas transformaciones; los políticos tampoco. Los gestores culturales, como ejecutores e ideólogos de proyectos en el contexto de estas nuevas realidades, han tenido como objetivo la configuración de equipos de trabajo cooperativo en los que con los medios a su alcance, a veces muy escasos o precarios, posibilitan acciones de visibilidad de esa nueva sociedad emergente que reivindica un lugar, y si es con una transparencia plagada de tolerancia, hacer de la convivencia y sus espacios compartidos un hecho sostenible.  

Los gobiernos y habitantes de las ciudades buscan ocupar su lugar en el mundo y, para ello, nada mejor que enfocar su gestión con las diferencias necesarias que hacen a cada espacio singular o común. La crisis económica que desde 2008 se evidencia con fuerza en España, obliga a plantear nuevas estrategias en el ámbito de la intervención artística en los espacios urbanos; programas que han de hacer frente a los ineludibles recortes presupuestarios para su materialización, lo cual con el tiempo implicará la revisión de nuevas acciones y actitudes políticas que, asociadas con la intervención cultural en los espacios urbanos, posibiliten la continuidad de proyectos de interés, por su carácter social y visualizador de la problemática en la que vive inmersa la totalidad de la ciudadanía.  

Y es la ciudadanía diversa como público, con sus aceptaciones y rechazos,(2) la que también lleva al planteamiento de la necesidad de satisfacer recursos que le hagan comprender de manera más directa y menos retórica los numerosos mensajes y acciones propuestos, la lectura de dichas intervenciones y la importancia de su desciframiento, ya que se considera como una necesidad cada vez más patente el hecho de interpretar y traducir incógnitas en un arte y una cultura plagados de acciones de difícil comprensión para la mayoría de los ciudadanos; intervenciones que aún revisten cierto halo de elitismo, no obstante que están destinadas al disfrute e implicación de toda la ciudadanía, no siempre dispuesta, tolerante o abierta a captar los mensajes que en código contemporáneo hacen de su lectura un mundo complejo, tan sólo destinado a ser resuelto por una minoría.

Arte y acciones culturales comprometidas con su ciudadanía requieren de explicaciones y respuestas permanentes. En esta línea analizamos dos proyectos de intervención pública, ambos de carácter internacional: uno propio nacido en la Comunidad de Madrid, cada vez más definido por su compromiso social y cooperativo, surgido como proyecto catalizador que procura transformaciones beneficiosas para la ciudad y sus habitantes; el otro de origen alemán, cuya repercusión se deja sentir en España por la implicación de una cultura visual comprometida con el colectivo de mujeres migrantes, que requieren de una visibilidad social más justa y equitativa.

En ambos, la colaboración y cooperación están presentes, ya que se pretende, por medio de la intervención artística y cultural, expresar preocupaciones, participar en la resolución de conflictos y contribuir a la visibilidad y mejora de situaciones difíciles que se dan cada vez con más frecuencia en nuestros entornos urbanos; el compromiso social que se requiere parte de conceptos como diálogo, participación, convivencia, acción e intervención.

Madrid Abierto

Este proyecto de cultura artística visual contemporánea, impulsado desde 2004, tuvo en sus orígenes la intención clara de activar diversas prácticas en el espacio público de Madrid. En su última convocatoria cambió su organización de anual a bienal, debido a que de este modo lo complejo de su gestión y coordinación permite a los artistas una mayor aproximación y conocimiento sobre el contexto urbano en el que van a intervenir; posibilidades de conexión entre algunos de los proyectos participantes entre sí y, a su vez, con diferentes agentes sociales, políticos e institucionales de la ciudad. Interesa especialmente cómo la gestión de dicho proyecto de intervención urbana propicia conjugar gran cantidad de actividades que abarcan desde las presentaciones de artistas participantes hasta mesas de debate y seminarios en los que se investigan y plantean aquellas posibilidades de trabajo colaborativo sociocultural con la búsqueda de la implicación y el compromiso político, al indagar en sus capacidades como impulsor de las transformaciones que se suceden y producen en la ciudad.

En Madrid Abierto se advierte en el transcurrir de sus ediciones un incremento participativo: en la última convocatoria se presentaron más de quinientos proyectos y casi ochocientos artistas de todo el mundo. Jorge Diez, su director, lo define como “un programa de intervenciones artísticas que trata de activar el espacio público reflexionando desde el arte contemporáneo sobre el entorno político, social y cultural”.(3)

Dicho proyecto, de muy compleja gestión, se posibilita por la implicación institucional pública y privada; en especial por el esfuerzo de personas comprometidas con la cultura contemporánea que buscan, además de poner en marcha numerosos activos del arte y la cultura actuales, satisfacer al público diverso que traspasa las fronteras de una compleja fórmula de contar historias concernientes al propio mundo que les rodea y que, gracias a este tipo de intervenciones públicas, se hace palpable y visible, invitando a la reflexión de la ciudadanía.  

Madrid Abierto, además de otorgar al ámbito de la escultura contemporánea un papel de privilegio, tiene cada vez más presencia de arte sonoro y arte audiovisual, trabajo llevado a cabo en torno al tema de la inmigración. En cuanto a este aspecto, en la última convocatoria 2009-2010 destaca lo realizado por el español Josep-María Martín o el arquitecto guatemalteco Teddy Cruz,(4) comprometidos ambos con estéticas que llevan a cuestionamientos de las problemáticas socioculturales y su particular fórmula de hacer visibles los conflictos.  

La difícil situación de hacinamiento en la que viven muchos de los inmigrantes en zonas como Lavapiés, en Madrid, llevó a Martín a realizar un documental sobre quienes comparten vidas, convivencias y dificultades del día a día y con un estatus social variable, dentro o no de la legalidad, en pisos patera(5) en los que se reúnen grupos numerosos de inmigrantes senegaleses en una situación tremenda y lamentable denominada “camas calientes”.(6) La acción parte de las entrevistas a los habitantes de estos espacios, así como a trabajadores sociales y agentes de inmigración, siendo muy interesante la participación activa en el proyecto de los propios inmigrantes que utilizan ellos mismos la cámara de video, siendo el producto resultado de tal acción proyectado en espacios urbanos al aire libre durante la noche. Teddy Cruz, con colaboraciones de colectivos internacionales y nacionales, tiene como punto de actuación establecer vínculos a través de la educación de niños inmigrantes en el barrio madrileño de Puente de Vallecas.

Educar para ver más allá de la apariencia

Una de las carencias en la gestión del proyecto Madrid Abierto era la falta de un buen proyecto educativo ligado a las intervenciones públicas, que como eje de actuación se han centrado desde su origen en el Paseo del Prado-Recoletos-Castellana, para terminar por ampliarse a espacios extramuros del eje, en búsqueda de sitios diversos desde un punto de vista territorial y social. Por ello se generó en la última convocatoria y como novedad de la sexta edición el plan didáctico Aula urbana: arte en la calle, que dirigido a cualquier ciudadano que quisiera participar, ha estado protagonizado por estudiantes de educación secundaria.

Esta estrategia plantea diferentes fases con la intención de que el alumnado participe en la percepción de las obras artísticas que se desarrollan en los espacios urbanos seleccionados, ya que es fundamental su conocimiento en el contexto real en el que se presentan.(7) La implicación de los jóvenes a los que se forma en la comprensión y análisis de este tipo de propuestas contemporáneas pasa por la importancia que adquiere el trabajo de campo desarrollado por los mismos, consistente en registrar la interacción de los públicos diversos y sus respuestas ante las obras por medio de encuestas, entrevistas, audiovisuales y fotografías. Entre los objetivos de esta experiencia piloto está facilitar competencias en los ciudadanos, de forma que la aproximación de éstos a la nueva cultura visual y artística que se desarrolla en espacios públicos les lleve a una interpretación y disfrute de lo que está presente en la realidad urbana observada, en la que es tan necesaria la reflexión crítica acerca de lo que acontece en la urbe, que promueve a su vez sentimientos de pertenencia al contexto urbano en el que se enmarcan las propuestas artísticas. A ello se suma el interés de la oferta estética en sí, mediante la observación y percepción crítica de aquellas alteraciones que las intervenciones artísticas, desde perspectivas multidisciplinares dispares, que son a la vez evocadoras y funcionales, provocan la reflexión sobre los valores estéticos proyectados en el espacio público y sobre los imaginarios del mundo urbano y su expansión territorial.

Proyecto Migrantas: acción en espacios públicos para la visibilidad de la mujer inmigrante

De gran interés por su significación en la construcción social es Migrantas,(8) proyecto de lenguaje visual en las urbes que pretende dar visibilidad a la mujer migrante por medio de acciones que abarcan diversidad de propuestas a partir de reflexiones sobre el mundo de la migración, la transculturalidad y las movilidades de esas miles de mujeres que abandonan sus espacios culturales propios en búsqueda de mejores alternativas a su vida laboral y las de sus familias. Precisamente en el ámbito de los sentimientos, de las sensaciones, de las dificultades y del imaginario que se configura en la mente de la ciudadanía, que hace que la invisibilidad de la problemática de dichas mujeres quede falta de atención, es lo que llevó a querer hacerlo patente a un equipo de mujeres plurales dedicadas a la acción artística, el diseño gráfico y las ciencias sociales, y a las que además une compartir la experiencia de la migración en Alemania. Poner en marcha este proyecto de cultura visual urbana mediante talleres reflexivos de sus propias realidades será uno de los objetivos primordiales que lleven a mujeres de diferentes estatus, razas, culturas y procedencias a materializar su visibilidad por medio del diseño gráfico, haciéndola accesible y comprensible para todos.

De los talleres reflexivos en los que van surgiendo los imaginarios de cada situación surgen posteriormente elementos identificativos, elementos que se reiteran de forma constante y que tras un trabajo de abstracción reflexiva artística profunda adquiere aspecto pictográfico, como un nuevo lenguaje visual sencillo de carácter universal.

Al transformarse la reflexión de la problemática femenina de las migrantas en crítica directa por medio de los pictogramas, en los que la síntesis y la expresividad son recursos artísticos significativos, se permite la visibilidad de las diferentes causas que las originan o de las diversas formas que adquiere, siendo el fin último del proyecto la exposición de resultados, convirtiendo los espacios de exhibición en lugares de intercambio donde el público lleva a cabo la experiencia de la reflexión, participación y acercamiento a esa otra realidad social.

Una de las estrategias para lo anterior consiste en la acción urbana integrada en el paisaje de la ciudad, diseños que pasan a formar parte de los carteles publicitarios colocados en diversos puntos o en el interior de transportes colectivos, las animaciones digitales o la impresión de diseños pictográficos en bolsas de compra, para conformar una suerte de diseños cada vez más reconocidos por todos, al insertar los pictogramas en el espacio público e integrar la subjetividad de las inmigrantes en el paisaje urbano y haciendo visible su situación para el resto de la ciudadanía.

La repercusión de Migrantas no se ha hecho esperar en España, debido a que la cuantificación de la mujer inmigrante de diferentes espacios geográficos, etnias y religiones lleva a la necesidad de valorar y reflexionar sobre la visibilidad y compromiso social ineludibles y a su eficaz integración en la sociedad. En ciudades como Córdoba, A Coruña, Sevilla o el Museo de Historia y de la Migración de Cataluña, sirven como marco de referencia de ciudades e instituciones de difusión cultural en las que en 2010 se presentó la imagen de la inmigración en sus espacios urbanos; se han programado conferencias, exposiciones, proyecciones y audios, trabajando desde la conciencia de la importancia de la integración de la subjetividad de la visión de los propios inmigrantes en el paisaje urbano, y la síntesis de lo llevado a cabo con anterioridad desde el inicio del proyecto en 2003, con experiencias y acciones urbanas de referencia llevadas a cabo en lugares como Berlín, Buenos Aires, Hamburgo o Colonia, entre otros.

Ambos proyectos: Madrid Abierto y Migrantas son de sumo interés en el mundo complejo en el que estamos inmersos, y dejan constancia patente de la importancia de la visibilidad de problemáticas globales que a todos nos afectan, siendo fundamental el de la inmigración por la necesidad de procurar un mundo más abierto, sensible, solidario y sostenible, en el que el arte y sus expresiones contemporáneas en la esfera pública tienen un papel fundamental de actuación reflexiva y crítica con el deber y la responsabilidad de permanecer y afianzarse.

Notas

1. Siah Armajani, Fallujah, Cuadernos de Estética de Artium, Vitoria, Bassarai, 2007.

2. Muy interesante es el estudio de Aurora Fernández Polanco sobre las dificultades para asimilar los discursos complejos del arte contemporáneo y la percepción del público, véase Formas de mirar en el arte actual, Madrid, Edilupa, 2004.

3. Véase Gestión Cultural. Estudios de caso, Barcelona, Ariel, 2008.

4. La actuación de este arquitecto contemporáneo, en colaboración con M7Red, ha tenido una especial significación por su interés en las dinámicas urbanas transfronterizas entre Tijuana (México) y San Diego (California) con las políticas de vigilancia e inmigración con todos los desequilibrios que se suceden en las ciudades contemporáneas. Su búsqueda de soluciones pasa por intentar nuevos conceptos de sostenibilidad económica y social, vivienda y densidad. Véase para mayor información sobre su intervención pública en Madrid Abierto: http://madridabierto.com/es/intervenciones-artisticas/2009/teddy-cruz.html

5. El término patera se usa como referencia al tipo de embarcación pequeña y plana que transporta a los inmigrantes de forma clandestina desde su punto de partida en las costas africanas hacia el territorio español. La expresión “pisos patera” se comenzó a utilizar en medios de comunicación para hacer referencia a viviendas superpobladas de inmigrantes generalmente ilegales, que se alojan bajo situaciones muy precarias y carentes de condiciones de habitabilidad saludables. En estos “pisos patera” se alquilan habitaciones o camas a inmigrantes, en aprovechamiento de su necesidad e irregularidad, y con base en precios abusivos.

6. Se denomina así a las camas que son alquiladas por turnos en los pisos patera, haciendo consciente a quien las renta de que en las horas acordadas tendrá que abandonarla para ser ocupada por otro inquilino de condición inmigrante transeúnte. Estas camas nunca llegan a enfriarse, ya que automáticamente son ocupadas por otras personas, que en ese trasiego de búsqueda de mejora de las condiciones de vida, hace que cada espacio tenga un precio independientemente del hacinamiento al que están destinados.

7. Los equipos de coordinación del proyecto educativo están ligados al ámbito universitario en un programa de doctorado de la Universidad Complutense de Madrid que lleva por título: “Aplicaciones del arte en la integración social: arte, terapia y educación en la diversidad”.

8. Véase www.migrantas.org