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En este artículo se ofrece una visión general de la historia y desarrollo del término blockbuster aplicado en el campo del arte, generalmente usado para denominar exposiciones que superan récords de asistencia. La hipótesis es que las exposiciones blockbuster en los museos no son una anomalía en su programación, sino que están plenamente alineadas con el interés por ampliar su público y reafirmar una mirada canónica sobre cierto artista o periodo histórico.

La distinción entre arte y artesanía ha sido ampliamente discutida por los estudios del arte y las ciencias sociales. En las prácticas socioterritoriales persiste esta diferencia, determinada por la lucha de clases, la estratificación social, los mecanismos de poder y los sistemas de valor; para explicar estas formaciones se presenta el caso de los diablitos de Ocumicho. De forma paralela, se analiza el estudio titulado Cuentos ácratas, que comparte con las piezas elaboradas en la localidad de Michoacán la producción de arcaísmos contemporáneos.

Breve narración de la historia detrás de este viaje y el descubrimiento del sitio en la década de 1940, incluyendo un recuento de los viajeros-exploradores extranjeros en Yucatán durante el siglo XIX, particularmente John Lloyd Stephens y su célebre libro Incidentes de viaje en Yucatán. El autor menciona algunos de los sitios arqueológicos que visitó, deteniéndose en el episodio de Robert Smithson, representante del Land Art, en Palenque y su contribución al arte contemporáneo. Continúa con una descripción sobre los grupos indígenas de Chiapas, la situación actual de las zonas arqueo­lógicas y la pugna con el Instituto Nacional de Antropología e Historia por el control de este patrimonio.

A partir de un taller de fotografía como dispositivo mediador nos acercamos a parte de la historia de seis niños y adolescentes haitianos limpiabotas en Santo Domingo, República Dominicana, quienes en el transcurrir de las sesiones no solo aprenden a tomar fotos, sino que nos enseñan cómo aprenden y se relacionan con otros, cómo el tiempo y el espacio tienen otro valor y, sobre todo, cómo sobrevivir en las condiciones límite en las que se encuentran.

Mediante el uso de imágenes o productos audiovisuales de natu­raleza simbólica se destacan ciertos rasgos tangibles y culturales de las urbes, tanto con fines comerciales como políticos y de expresión personal. De la gran cantidad de objetos representacionales de ciudad, en este artículo interesan dos: el render arquitectónico, creado con el propósito de comunicar un proyecto de forma sencilla a un público no especializado, y la obra de arte distópica, es decir, la representación artística de las problemáticas sociales que desafía la idea de urbe establecida por los medios tradicionales.

El autor propone explorar lo que llama el pensamiento espectral de la música. La primera parte del ensayo es desarrollada a través de su vivencia y el conocimiento que configura una poética de la experiencia musical. En la segunda parte se aproxima al pensamiento semiótico como una estructura en el orden representacional que delinea maneras de comprender con facilidad los niveles de percepción, recepción y escucha.

Mediante el análisis interdisciplinario de las obras Chiclegrafías, Me gustaría que estuvieras aquí… y Cuestión de fe se examina cómo a través del arte se enriquece la construcción de conocimiento. La emergencia de la quinta máquina como constructo teórico se contextualiza dentro de estos estudios de caso, enfoque favorecido por el je ne sais quoi del arte, que ofrece una perspectiva holística que trasciende la explicación puramente racional.

Las artes que involucran sonido permiten a quien escucha desarrollar procesos de aprendizaje en los que el mundo, la realidad y nuestros propios cuerpos tejen redes que posibilitan el intercambio de afectos. Los sonidos ordinarios permiten reaprender a percibir el entorno y, atendidos sin prejuicios, pueden llegar a emanciparse de la fuente que los produce y propiciar una experiencia multisensorial que detona la percepción estética.

Se presentan ocho herramientas didácticas modelo para la edu­cación superior de las artes, no como manual sino como el recuento de experiencias colaborativas en investigación y el conocimiento heurístico resultante. Se fundamentan en el proyecto de artes y arqueología Transcavaciones y en el curso impartido en la licencia­tura en Docencia de las Artes en la Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado La Esmeralda.

Planteamientos de un seminario que, por más de dos décadas, ha experimentado con modelos semióticos de corte triádico para la construcción de proyectos de investi­gación en educación y producción artísticas. Ruta de trabajo en la que la propia experiencia de reflexión y producción configura una visión interdisciplinaria que, desde la lógica del conocimiento, permite modelar y reconocer procesos y combinatorias individuales de creación, ante el peligro de caer en dependencias epistémicas de las diversas disciplinas de apoyo y la deficiencia que produce su imposición jerárquica.

La investicreación artística desarrolla lazos disci­pli­nares y una perspectiva interdisciplinaria. En este artículo se analizan los fundamentos, principios y elementos metodo­lógicos empleados en el seminario para propiciar procesos creativos y generar conocimiento específico de las artes a partir del desarrollo de proyectos y tesis de estudiantes de posgrado, docentes, artistas e investigadores.

El Taller de Teatro Sin Límites se imparte de manera extracurricular desde 2013. Se realiza una revisión histórica del CCH, así como de su modelo de enseñanza, para identificar su relación con el diseño educativo del taller. Se retoman los postulados pedagógicos de autores como Vigotsky, Freire y Boal, con aportaciones significativas al campo del arte y la educación.

Realizado de 2015 a inicios de 2020, el taller se convirtió en un proyecto de investigación del que surgieron estrategias inclusivas para desarrollar competencias artísticas y fomentar la cultura de paz. En la actualidad estos principios se flexibilizan y reinventan para ampliar sus alcances al mapa curricular de la EIA 4 y, sobre todo, construir una escuela donde todas y todos aprendan a aprender con calidad y equidad de oportunidades.

Hay varios aspectos para interpretar entre líneas en el relativamente extenso y, al mismo tiempo, austero oficio que aquí se presenta. Fue redactado en 1942 por el entonces recién nombrado director de la Escuela de Artes Plásticas —hoy Escuela Nacional de Pintura, Escultura y Grabado, La Esmeralda—, el pintor Antonio M. Ruiz, dirigido al director general de Educación Extraescolar y Estética de la Secretaría de Educación Pública.